22 enero 2015

Visión espacial.

Mi relación con el espacio es desastrosa. No consigo imaginarme las cosas vistas en planta. No me hago cargo de nada. Veo tabiques y puertas (no sé dónde están las ventanas) pero soy incapaz de visualizarlo en tres dimensiones. Y me siento un poco retrasada con mi ceguera espacial. Es que es más probable que vea a la Virgen en los macarrones…



Este asunto pasaría más desapercibido si mi padre y hermAna no fueran arquitectos. Pensaba que, por simple cercanía, debería haber interiorizado algo. ¿No hacía el roce el cariño? Pues va a ser que nada en absoluto, estoy recién salida de las cavernas. Hago como que entiendo sus planos y sus historias y comparto su entusiasmo “¡Qué chulo os está quedando!” pero la verdad es que no veo. Para mí es una casa y, en un plano, todas me resultan extremadamente parecidas (no diré iguales porque sé contar el número de habitaciones). Así que intento ocultar mi desorientación sin hacer preguntas que, en mi caso, serían siempre delatoras. Menos mal que hermAna me tiene calada y me enseña una imagen 3D -para tontos- y así puedo dejar de fingir, ya sé dónde está el tejado.

Para alguien que tiene visión espacial, mi falta de aptitudes roza el analfabetismo: cómo no lo voy a ver si lo pone ahí. Es como si no supiera leer y, en cierto modo, es así porque un plano es un jeroglífico para mí. Necesitaría que, al lado de las puertas, pusieran un letrero en el que se las identificara como tal y que, además, se pudiesen abrir y cerrar como los cuentos infantiles. Así, vería la habitación que asoma al otro lado y todo estaría mucho más claro.

No sólo el espacio me es completamente ajeno, también su medida. Me da igual un metro cuadrado, que diez o cien, sobre todo porque nunca es un cuadrado de 10x10… Una hectárea me suena tan a chino como una yarda, un pie, una milla o una pulgada.
Para grandes superficies, pido la traducción en campos de fútbol, como si fuera capaz de representarme la extensión de 20. Al final, mi sistema métrico se resume a
  1 campo de fútbol = Grande
>1 campo de fútbol = Muy grande
>100 campo de fútbol = ¿Eso no es un país pequeño?


Lo peor es que esta incultura no se quita, es pura incapacidad. Soy espacialmente ciega. Una analfabeta de las dimensiones. Una inepta de las medidas. Tal vez sólo esté hecha para la regla de 30 centímetros porque, a partir de ahí, el asunto me desborda.

4 comentarios:

  1. http://javiermegias.com/wp-content/uploads/2014/07/educacion-nio-genios-pez-arbole-escalar_thumb.jpg

    Non ti preocupare!!:

    "Todos somos genios. Pero si juzgas a un pez por su habilidad para trepar a un árbol, vivirá toda su vida pensando que es un inútil". Albert Eistein

    ;-)

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¡Muy buena cita y un gran consejo!
      Mi frustración no llega a esos niveles -menos mal- pero sí me gustaría poder ver algo, aunque sea un poco...

      Eliminar
  2. Lo malo no es que te pase a ti que no te estas haciendo una casa , no te puedes imaginar los clientes de los arquitectos ni puta idea, todo les parece pequeño te dicen 100m2 de casa y si los dejaras 500 m2 les seguiria pareciendo pequeña .Toda la vida le he dicho a tu padre que les haga muchas perspectivas que si no no se enteran aunque siempre dicen que si que esta clarisimo¡¡¡ A si que por ahora no te preocupes ya aprenderas fijate en Pepa lo que sabe ya de medidas y todo.La Anciana

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Los cliente creerán que se están enterando pero, al ver las perspectivas, se darán cuenta de que no habían entendido nada. Y seguro que es cuando empiezan a marear al arquitecto con cambios.

      Yo tampoco tengo ni idea de la pinta que tendrá lo que está haciendo, ni me atrevo a decírselo a papá.

      Eliminar