02 febrero 2015

Llenando estanterías.

El síndrome de la balda vacía nos afecta a todos. Nadie está libre de tener en su casa un estante pendiente de completar. Y no con mierdas –no es un armario- sino con ese armonioso batiburrillo de cosas que, juntas, dan a la estancia tu toque personal. Entonces, tu casa estará habitada, decorada, terminada, vivida.


Una estantería desocupada es de lo más desangelado. Parece que te acabaras de mudar, como si toda tu vida siguiese en las cajas pendiente de ser colocada. Pero no es así, tus libros, discos, películas y fotos ocupan el 10% del espacio de almacenaje decorativo de tu hogar. Toda una existencia en tan poco espacio… Es lo que hay, vamos a tener que esforzarnos para conseguir ese look arreglado pero informal de las revistas de decoración.

El caso es que nunca encontramos el momento, ningún objeto parece adecuado y la faena sigue sin rematar. Así que vamos a ponernos manos a la obra y ver qué nos ofrece IKEA. Pasaremos por alto los muebles y nos centraremos en todos los objetos que colocan en las repisas, mesillas, baldas, estanterías, armarios, vitrinas y mesas.

Aunque una buena colección de libros siempre ayuda, no es un requisito indispensable. Un par estaría bien que tuvieras (y ya que estás, siempre los puedes leer) pero se aceptan también colección de revistas con lomo. Vemos que, incluso, hacen del propio libro un objeto decorativo doblando algunas páginas. ¡Qué ocurrentes!





Indispensable pasarse por la sección de jardinería. Ahí está nuestra gran baza: plantas, jarrones, macetas, botes, invernadero, candelabros y velas, campanas de cristal, regaderas. La combinación de todos estos elementos llenará nuestro espacio.











Imposible no pararse en la zona de menaje. Los tarros, platos, boles, jarras, botellas, vasos y fuentes se transforman en objetos decorativos alucinantes. Se requiere tener la mente abierta, porque una tabla de cortar y una bandeja pueden quedar genial.






Por supuesto, un tour por almacenaje de oficina, que con sus clasificadores, archivadores, botes para lápices y cajas, dará a nuestra biblioteca mucho empaque.







Y no nos olvidemos de coger alguna lámina, unos cuantos marcos, un reloj de pared.





Si tenemos suerte, encontraremos incluso algún objeto decorativo para colocar directamente en nuestras estanterías.



Et voilà!






Mezclando con gusto y sabiduría nórdicos –que copiaremos tal cual-, hemos conseguido acabar con las baldas vacías.

6 comentarios:

  1. Copy-decopaste del bueno, Lolichi...

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  2. esas gallinas en medio de un pasillo eh!!! aunque parecen de verdad .....y claro no siempre estarian en el pasillo, cosas muy chulas has sacado .La Anciana

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    1. Habría que disecar a la gallina antes de colocarla en una balda. Es un paso importante que no debemos olvidar.

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  3. Respuestas
    1. Habéis dejado un gran vacío, alguien tenía que llenar las estanterías...

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