Hay
que enseñar a los niños a jugar, transmitirles que las cosas no siempre salen
como uno quiere. Tienen que aprender a gestionar la frustración, a disfrutar
del juego, saber que el esfuerzo también es gratificante.
Puesta
en práctica de toda esa morralla edificante sobre la derrota una tarde jugando
al Tragabolas con el niño con peor perder del universo:
- Hay que saber ganar y perder.
- A los demás también nos gusta
ganar.
- Antes has ganado tú, no puedes
ganar siempre.
- No pasa nada, seguro que la
próxima vez ganas tú.
- Mike el Caballero no se
enfada cuando pierde.
- Para aprender a jugar bien,
hay que perder primero.
- Los auténticos campeones no
siempre ganan, como Rayo Macqueen que no ganó la carrera pero fue un campeón,
¿te acuerdas?
- Como te vuelvas a enfadar,
regalo el juego a las vecinas.
- Para ser un auténtico campeón,
hay que aprender a perder y a ganar.
- Los ganadores no son siempre
los campeones, como Chick Hicks, que ganó la carrera pero no era un auténtico
campeón.
- Jugando también te lo pasas
bien, aunque pierdas. ¿No te estás divirtiendo?
- Si te sigues enfadando,
guardamos el juego.
- No se hacen trampas.
- Antes he perdido yo y no me
he enfadado.
- Pues jugamos los demás. ¡Qué
bien nos lo estamos pasando! ¿Seguro que no quieres venir a jugar con nosotros?
- Llegar a la meta también es
importante, El Rey era un campeón porque terminó la carrera aunque no ganó.
- No se llora, si nos lo
estamos pasando súper bien…
- Pues ahora voy a enfadarme yo
porque has ganado tú. ¿A que no te gusta? Pues a mí tampoco me gusta que tú te
enfades cuando pierdes.
- No vale que sólo sea
divertido si ganas tú.
- ¡Como sigas así, no se vuelve
a jugar!
Mi
intención era buena. El resultado, esta sarta de mensajes contradictorios, pasando
de la lección vital al vil chantaje emocional. Y encima terminé pasando bolas
a su montaña para que no se cabreara.
Porque
lo importante no es ser coherente, es parecerlo.
Brutal el rollo bipolar. En casa también lo practicamos de lo lindo...
ResponderEliminar¡Me sentía atrapada!
EliminarGran post!! Muy fan de las metáforas Cars...
ResponderEliminarDe momento, Cars es nuestra fuente principal de héroes y lecciones vitales. Espero ir ampliando el repertorio.
EliminarMe apunto todas estas frases para cuando me toque...aunque espero que sea de esos niños que saben perder sin pataleta (¿existen realmente?).
ResponderEliminarBuen post Lola! Martuja
Martuja, Rayo Macqueen es el Confucio infantil; ya encontrarás alguna utilidad a sus sabias palabras…
Eliminar